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Ferrari (Estados Unidos, Reino Unido, Italia, China 2023). Dirección: Michael Mann. Guion: Troy Kennedy Martin y Brock Yates. Protagonistas: Adam Driver, Penélope Cruz, Patrick Dempsey, Gabriel Leone, Giusepe Festinese y Shailene Woodley. Duración: 130 minutos.
Ferrari, es como su título indica, la biopic de Enzo Ferrari, dirigida por Michael Mann y protagonizada por Adam Driver, como el prestigioso empresario automovilístico cuya compañía lleva su apellido. Y completan el elenco la ganadora del Oscar Penélope Cruz como su esposa y socia de la compañía Laura, Patrick Dempsey, Gabriel Leone, Giusepe Festinese y Shailene Woodley, entre otros.
La historia transcurre en la ciudad de Módena, Italia en 1947, cuando Enzo Ferrari atraviesa una crisis financiera de la que puede salir únicamente si sus corredores ganan la prestigiosa carrera de las mil millas a través de Italia. Lo que complica mas aún las cosas con su esposa, a quien no puede ocultarle más a la existencia de su amante Lina Lardi (Woodley) y de su hijo extramatrimonial Piero (Festinese).
El principal problema de esta película es que su director busca abordar demasiados temas al mismo tiempo, pero no ahonda en ninguno, por lo que su estructura narrativa termina resultando desordenada. Y los personajes de los pilotos quedan desaprovechados, porque no tienen el desarrollo que corresponde, ya que sus escenas de carreras, en las que se luce el preciso trabajo de edición, sello característico de la obra de su director, quedan demasiado cortas.
Un párrafo aparte merece Adam Driver, en la piel de otro prestigioso empresario italiano, luego de La casa Gucci (House of Gucci, Riddley Scott 2021), que utiliza la frialdad como herramienta para mantener el control tanto de su negocio como de su vida personal. Y que se complementan con el carácter pasional de su esposa, con un muy buen trabajo de Penélope Cruz, a pesar de que protagoniza la menos interesante de las subtramas, porque los espectadores ya conocemos desde el comienzo el resultado de aquello que investiga.
En conclusión, Ferrari es una película que por su ambición de abarcar demasiados temas termina resultando desordenada, desaprovechando lo que hubiera podido ser la fusión perfecta entre “Tucker, un hombre y su sueño” (Tucker: the man and his dream, Francis Ford Coppola 1989) y “Contra lo imposible” (Le Mans’ 66, James Mangold 2019). Dejando al espectador con ganas de ver más escenas de esas escenas de carreras tan bien realizadas y menos de conflictos empresariales.
PATRICIO FERRO