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El duro (Road House, Estados Unidos 2024). Dirección: Doug Liman. Guion: Anthony Bagarozzi, Chuck Mondry y R. Lance Hill. Protagonistas: Jake Gyllenhaal, Daniela Melchior, Jessica Williams, Billy Magnussen y Conor McGregor. Duración: 121 minutos.
El duro es la remake de la película de 1989, disponible en Amazon Prime Video, y protagonizada por Jake Gyllenhaal en lugar de Patrick Swayze. Está dirigida por Doug Liman, y completan el elenco Daniela Melchior, Jessica Williams, Billy Magnussen y el debut cinematográfico del luchador de artes marciales mixtas Conor McGregor, entre otros.
La historia se centra en Dalton (Gyllenhaal), un luchador de UFC caído en desgracia, que consigue trabajo de seguridad en un bar ubicado en los Cayos de Florida. Donde se enfrenta a un grupo de motoqueros, a las órdenes de un mafioso local, que busca quedárselo para construir un hotel, por lo que van todas las noches a generar destrozos y espantar a los clientes.
En primer lugar, es necesario aclarar que su director toma prestados elementos del western para elaborar su puesta en escena, como es explicado al comienzo utilizando una innecesaria autoconciencia, ya que se menciona el tema ni bien su protagonista llega al pueblo. Y si bien es cierto, porque Dalton, al igual que el Bill Munny de Clint Eastwood en “Los imperdonables” (Unforgiven, Clint Eastwood, 1992), busca imponer su ley en un lugar donde fallan las instituciones, como forma de redimirse, el resultado es absolutamente opuesto. Porque todo se explica demasiado, especialmente en los momentos previos a las escenas de acción, lo que en lugar de generar gags produce un efecto anticlimático.
Un párrafo aparte merecen las actuaciones, donde Jake Gyllenhaal vuelve a interpretar un personaje parecido al de “Redención” (Southpaw, Antoine Fuqua 2015), pero que en lugar de trabajar como profesional sorprende a sus contrincantes con una conversación previa que se vuelve larga e innecesaria. Todo lo contrario al impulsivo Conor McGregor, que se divierte con su papel de villano, sacando provecho de su personaje impulsivo y desaforado, que rompe todo a su paso, y se luce en las luchas más que el protagonista.
En conclusión, El duro se suma a la lista de remakes fallidos de películas queridas por el público, lo que no necesariamente convierte a la original en una obra maestra. Desaprovechando la eficacia de los lugares comunes del género, con explicaciones anticlimáticas, volviéndola un producto adocenado y fácilmente olvidable.
PATRICIO FERRO