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La vida ante si (La vita davanti a sé, Italia 2020). Dirección: Edoardo Ponti. Guion: Ugo Chiti, Fabio Natale y Edoardo Ponti, basada en la novela La vita davanti, de Romain Gary. Protagonistas: Sophia Loren, Ibrahima Gueye, Renato Carpentieri, Babak Karimi y Abril Zamora. Duración: 94 minutos.
La vida ante sí es una remake italiana de la francesa Madame Rosa (La vie devant soi, Moshé Mizrahi 1977), ganadora del Oscar a la Mejor Película Extranjera, protagonizada por la estrella del cine italiano también ganadora del Oscar Sophia Loren. Y está dirigida por su hijo, Edoardo Ponti, y acompañada por el debutante Ibrahima Gueye, Renato Babak Karimi y Abril Zamora, entre otros.
Basada en la novela La vita davanti de Romain Gary, cuenta la historia de Momo (Gueye), un huérfano que pasa a vivir bajo el cuidado de Madame Rosa (Loren), una prostituta retirada que se gana la vida cuidando niños en situación de calle. Y lo que pasa a ser una relación conflictiva, se termina convirtiendo en una amistad entre dos personas que buscan sobrevivir dentro de una sociedad que los margina.
Lo primero que vale la pena destacar de esta película es el uso de las elipsis, para evitar golpes bajos, o largas explicaciones para mostrar el dolor que atraviesan sus personajes, porque es algo que queda claro desde el primer momento. En cambio, Ponti recurre a la puesta en escena característica de la edad de oro del cine italiano, insertando gags, que liberan la angustia del espectador para generar emociones más genuinas en esta aparente contradicción.
Un párrafo aparte merece la actuación de Sophia Loren, interpretando lo que podría ser la vejez del personaje de Mara, que personificó en Ayer, hoy y mañana (Ieri oggi domani, Vittorio De Sicca, 1963), y que detrás de su carácter malhumorado y explosivo esconde una enorme misericordia, que puede verse en cómo evoluciona su relación con Momo.
Y si bien Momo tiene un rol protagónico, cumple la función de ser el punto de vista del espectador, a través del cual conocemos a Madame Rosa, y vemos reflejada la influencia positiva que ejerce sobre él en las decisiones éticas que toma y que lo llevan a cambiar su comportamiento. En conclusión, La vida ante sí, es una película pensada para el lucimiento de Sophia Loren, y que se logra sin abandonar la historia ni opacar a los demás. Y es así como la diva del cine europeo hace realidad el sueño de Gloria Swanson en “El ocaso de una vida” (Sunset Bvd, Billy Wilder, 1950), y permite ser descubierta por una nueva generación de espectadores.
PATRICIO FERRO