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Argylle: Agente secreto (Argylle, Estados Unidos, Reino Unido, 2024). Dirección: Matthew Vaughn. Guion: Jason Fuchs. Protagonistas: Henry Cavill, Bryce Dallas Howard, Brian Cranston, Samuel L. Jackson, Dua Lipa y Sam Rockwell. Duración: 139 minutos.
Argylle: Agente secreto es otra película de espías dirigida por Matthew Vaughn, en la que si bien mantiene el mismo estilo de la franquicia de “Kingsman: servicio secreto” (2014) y sus secuelas, no comparte el mismo universo diegético. Y está protagonizada por un elenco de numerosas figuras, encabezado por Henry Cavill, junto a Bryce Dallas Howard, Brian Cranston, Samuel L. Jackson, Dua Lipa y el ganador del Oscar Sam Rockwell, entre otros.
La historia se centra en Elly Conway (Howard), una exitosa escritora de novelas de espionaje protagonizadas por el agente Argylle (Cavill), que es perseguida por miembros del sindicato mundial de espías que aparece en sus libros que buscan asesinarla. Viendo como se difumina el límite entre realidad y ficción, mientras recorre el mundo junto al agente Wilde (Rockwell), que acude a su rescate.
En primer lugar, es necesario aclarar que Matthew Vaughn es la persona ideal para dirigir esta película con un guión a cargo de Jason Fuchs, tanto por la fusión entre humor y acción, como por mostrar el proceso de cómo una persona común se convierte en heroína. Pero lo que la diferencia del resto de su obra, volviéndolo un producto adocenado, es la falta de violencia explícita, resultando únicamente las escenas de acción que conforman el clímax, que llega luego de una cantidad excesiva de vueltas de tuerca, las únicas donde puede verse su ingenio autoral.
Un párrafo aparte merecen las actuaciones, en las que se desaprovecha el talento de Brian Cranston como un villano principal tan estereotipado como el héroe imaginario que compone Henry Cavill. Siendo Sam Rockwell quien verdaderamente se luce, ya que se divierte con este personaje complejo, cuyo arco argumental resulta el más interesante. A pesar de cumplir el rol secundario de mentor de una Byrce Dallas Howard adecuada para su personaje.
En conclusión, Argylle: Agente secreto es una película que desaprovecha una idea que no por explotada muchas veces en innumerables comedias de espionaje deja de resultar interesante. Ya que tiene una cantidad excesiva de vueltas de tuerca, con sus explicaciones correspondientes, y la escasez de escenas de acción hacen que su duración resulte demasiado larga, y hasta por momentos aburrida.
PATRICIO FERRO